Desde el año pasado, en el Hogar Nuestra Señora de la Merced de Independencia se realiza el “Taller de Cocina”,  el cual busca que las residentes puedan participar activamente en la elaboración de comidas, lo que les permite rememorar, utilizar dotes culinarios que aún mantienen y degustar deliciosas recetas que sean de su interés.

La iniciativa que surgió por parte de los alumnos de Terapia Ocupacional del Instituto Profesional de Chile, quienes realizan su internado en el Hogar, tuvo que ser suspendida por un tiempo, pero fueron las mismas residentes quienes pidieron que volviera, por lo que en mayo de este año, se retomó nuevamente.
 
“Volvimos a implementar el taller de cocina porque nuestras residentes lo disfrutan mucho, en este Hogar son puras mujeres y es muy probable que gran parte de sus vidas estuvieron encargadas de la cocina en sus hogares, entonces les gusta mucho participar y son muy activas”, comentó Marisel Valdés, Terapeuta Ocupacional del Hogar.

Durante este año se han realizado dos talleres, en el primero se hicieron cocadas y en el segundo sopaipillas. Estas instancias son organizadas por la Terapeuta Ocupacional junto al Nutricionista, quienes reciben la ayuda de la Dirección del Hogar para conseguir recursos necesarios y así poder brindarles estos espacios que son muy beneficiosos para ellas.
 
“Con este taller trabajamos muchas habilidades cognitivas como la atención, la motricidad fina y las reminiscencias importantes y emotivas de sus pasados, porque a través de la comida recuerdan distintas etapas de su vida, y además pueden comer estas cosas ricas de vez en cuando”, expresó la Terapeuta Ocupacional.

Además esta actividad les permite estar más conectadas a la identidad cultural chilena a través de las recetas y comidas típicas que las residentes van pidiendo.
 
“La alimentación es un acto cultural importante en la sociedad, ya que a través de ella no solo nos nutrimos, si no que demostramos preocupación y cariño, entonces para las adultas mayores preparar estas comidas les impacta positivamente en varios sentidos” señaló Juan Manuel, Nutricionista del Hogar.

Las residentes valoraron estas instancias y están entusiasmadas por continuar el taller. “Me gustó mucho hacer sopaipillas porque me encanta participar de estas actividades y hacer comidas ricas”, comentó Esther Gaete, residente del Hogar Nuestra Señora de La Merced de Independencia.

“Me gustó participar de los talleres de cocina porque en eso trabajé muchos años, entonces fue entretenido hacer las cocadas y sopaipillas, espero que para el próximo taller se hagan completos” expresó Susana Mella, otra residente del Hogar.

A pesar de que son entre 10 u 11 las residentes fieles que acompañan este encuentro, el Taller de Cocina pretende realizarse todos los martes en la mañana, para seguir motivando a las demás a una jornada entretenida a través de la comida, que les permita degustar y disfrutar.