En el marco de la Solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús, patrono de Fundación Las Rosas, el jueves 27 de junio conmemoramos nuestro Aniversario N° 52. Aquí renovamos nuestro compromiso de acoger y cuidar a los mayores, hasta el último día de sus vidas.

En la ocasión también destacamos a los colaboradores que cumplieron 10, 15, 20 y 25 años de trayectoria en nuestra institución, y a los ganadores del Premio Espíritu Fundación 2019, quienes fueron escogidos por sus compañeros de trabajo, por hacer vida nuestros valores, en especial el de la Corresponsabilidad Social.

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Gregorio Airola, Director de Personas, felicitó a todos los colaboradores premiados, recalcando que son un ejemplo de cómo podemos vivir la santidad en nuestro trabajo: «Al comenzar en la mañana, el ofrecimiento del día, el saludo con la señal de la cruz, el desayuno, el baño, el vestir, el almuerzo, el rezo del santo rosario, lavar, planchar, cocinar, barrer, dar las gracias por el día. Esto que aparentemente es muy ordinario, se transforma en extraordinario cuando lo hacemos viendo a Cristo en cada residente».

Posteriormente nos dirigimos en procesión, rezando el Santo Rosario, hacia el Santuario a María Santísima, para participar en la celebración de una Eucaristía, que fue presidida por nuestro Capellán, Padre Andrés Ariztía.

En su mensaje, el Padre Andrés explicó que el Sagrado Corazón de Jesús nos enseña que el amor es servicio: «es un amor que hace el bien siempre, que nos engrandece, nos ayuda a enfrentar la vida con coraje». Además, es un amor personal, ya que el Señor «conoce a las ovejas por su nombre. Nosotros no cuidamos al de la cama 3, cuidamos a don Pedro, a la señora María; construimos un vínculo en esta sociedad moderna tan profundamente individualista. Y cuando se van a la Casa del Padre, ellos nos agradecen desde el Cielo, se convierten en grandes intercesores», comentó.

Premio Espíritu Fundación

Las colaboradoras escogidas como Premio Espíritu Fundación 2019 tuvieron más de una jornada para disfrutar su reconocimiento, pues esa misma tarde participaron en una especial cena, donde pudimos seguir ‘cuidando a quienes cuidan’. En la mañana siguiente, fueron parte de un recorrido por el centro histórico de Santiago y luego asistieron a un almuerzo en nuestra Casa Central. Allí fueron sorprendidas con un video que muestra a nuestros residentes saludándolas y felicitándolas por su importante labor.

Lucero Rodríguez, colaboradora de la Dirección de Desarrollo y una de las premiadas de este año, agradece profundamente el reconocimiento recibido: «Es fascinante, porque uno se dedica siempre a trabajar y nunca se dedica a uno. Me sentí reconocida por todos mis compañeros; fue tan grande mi alegría que le conté a toda mi familia».

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