Durante 2019, toda la Fundación y en especial la Subdirección de Salud y su equipo, en conjunto con los profesionales de la Salud de los Hogares, se abocaron a la tarea de implementar el Programa Piloto de Salud Mental (PSM), dirigido especialmente al 80% de residentes que hoy padece deterioro cognitivo y demencias, como Alzheimer.

En los 4 Hogares de prueba, se evaluaron a 335 residentes, de los cuales se escogieron a 68 para aplicar esta fase exploratoria. A la fecha, los resultados demuestran que, un 51% de los residentes respondió de manera “buena” y “óptima” a la intervención; es decir, sus síntomas psicológicos disminuyeron (35%) o remitieron en su totalidad (16%), luego de aplicar los 5 pilares del programa: atención clínica, ajuste farmacológico, intervención de espacios, acompañamiento espiritual y emocional y uso de terapias complementarias. Solo un 4% presentó una respuesta indiferente a los cuidados. 

“No se trata sólo de cuidar, sino de cuidar con cariño, porque en la última etapa de las demencias pareciera ser que eso es lo único que nos mantendrá conectados”, explica la terapeuta ocupacional y coordinadora del PSM, Egnis Ubillo.

Aporte de los Amigos FLR

Respecto de las Terapias Complementarias, la profesional explica que Musicoterapia y Aromaterapia fueron las más utilizadas. También destaca la terapia biográfica, que “resultó un gran apoyo para el trabajo de las cuidadoras”. Además, en el 82% de los casos los síntomas conductuales y psicológicos se asociaron a factores ambientales reversibles, tales como: cambios de habitación, de cama, de intensidad de la luz, posición de los muebles, espacio para guardar cosas personales, zona de seguridad, entre otros.

La implementación de la fase piloto de este programa se produjo gracias al apoyo de los Amigos FLR, quienes participaron en la Campaña de Semana Santa, con la cual se obtuvieron los primeros recursos. Estos fueron destinados a la compra de los insumos para aplicación de las terapias complementarias, capacitación de cuidadoras y construcción de la primera Sala de Estimulación Sensorial, en el Hogar Nuestra Señora de Las Rosas, en Casa Central (en las fotos).

En definitiva, un primer año muy auspicioso para este nuevo modelo de cuidados que beneficia a las personas mayores con demencias y que ahora espera poder expandirse al resto de los Hogares de la Fundación. ¡Gracias Amigos!