¿ERES EDADISTA?
El Edadismo es un problema mundial. La OMS la define como «la discriminación que abarca estereotipos contra grupos de personas debido a su edad. Puede tomar muchas formas, como actitudes prejuiciosas, prácticas discriminatorias o políticas y prácticas institucionales que perpetúan estas creencias»
La invitación es a “pensar, sentir y actuar frente a otras personas, dejando de lado barreras que a priori establecemos en función de la edad, y que más bien nos demos la oportunidad de conocer la realidad particular de cada persona”, explica la Terapeuta Ocupacional y Supervisora de Salud Mental en Fundación Las Rosas, Egnis Ubillo.
Tal como explica la profesional de Fundación Las Rosas, las consecuencias del edadismo pueden llegar a ser el maltrato, la baja autoestima y la exclusión de las personas mayores. Son muchas las consecuencias que tiene para las personas mayores el uso y atribución de estereotipos; una especialmente relevante es que ellas mismas tienden a adoptar la imagen negativa predominante en la sociedad y a comportarse de acuerdo con esta imagen.
“Muchas veces los discriminamos por desconocimiento a través de nuestro lenguaje cotidiano, diciéndoles sin distinción y de forma paternalista, términos como: ‘abuelitos’, ‘tatitas’, ‘dependientes’, ‘ancianos’, ‘cargas’, ‘sector pasivo’, entre otros«.
Aunque para muchos esto es solo algo anecdótico, diversos estudios establecen que el edadismo puede llegar a afectar la salud física y emocional de una persona mayor, asociando esta situación con otras enfermedades como obesidad, demencia y depresión… y tú, ¿eres edadista?
Pensamientos edadistas:
-¿Aún estás trabajando a tu edad?
-Por qué no dejas que alguien más joven se encargue de eso…
-Las personas mayores no pueden manejar la tecnología
-Eres demasiado mayor para eso…