Prevención de riesgos
Desde el punto de vista del cuidador o cuidadora, debemos evitar los sobreesfuerzos. El cuidar a un adulto mayor requiere manejar una serie de técnicas para poder movilizarlo y entregarle el cuidado apropiado. Además, dependiendo de su funcionalidad, es decir, si son valentes, semivalentes o no valentes, debemos tener mayor cuidado al movilizarlos para evitar las úlceras por presión u otro tipo de lesiones. A esto se agrega el factor emocional, porque una persona en su casa cuida a un familiar, a alguien que conoce. Dependiendo de las patologías de los adultos mayores, pueden tender a ser más agresivos o a desconocer, y este comportamiento muchas veces es recibido por el cuidador como una agresión personal. Entonces, debemos promover el cuidado integral de los cuidadores. El cuidado físico y también el cuidado mental-emocional de las personas.
Para prevenir caídas en adultos mayores es importante acondicionar la casa. Ésta tiene que tener ciertas ayudas para el adulto mayor. Tiene que tener, por ejemplo, pasamanos en las duchas y en los pasillos, para que ellos se vayan afirmando, porque son inestables, tienen menos visión, tienen su estado físico más inestable y esto provoca que exista mayor probabilidad de sufrir una caída. Además, está el factor ambiental. Muchas casas tienen baldosas que no son antideslizantes, muchos viven en segundos o terceros pisos, etc. Por eso, dentro de lo posible, siempre hay que acondicionar la casa donde vive el adulto mayor pensando que no tenga elementos resbalantes, que tenga ayudas para que pueda afirmarse, principalmente en las duchas y el baño, que no quede nada húmedo. El calzado del adulto mayor también tiene que adecuado, idealmente con suela de material antideslizante, ese tipo de cosas.
Para evitar lesiones, es recomendable realizar pausas activas. Podemos buscar en internet información para recuperar las manos, los hombros, la columna, la musculatura de las extremidades superiores, porque eso es lo que más se resiente. Al momento de realizar alguna actividad con el adulto mayor, la comunicación también es muy importante. Decirle lo que vamos a hacer. Por ejemplo, si lo vamos a mover sin decirle que lo vamos a mover se va a sorprender y quizás va a tender a aletear. Y eso es un riesgo para la persona que lo está movilizando porque requiere mayor sobreesfuerzo. Es recomendable mantener una rutina de gimnasia de pausa, estiramiento de los tendones, musculatura de manos, muñecas, brazos, columna, cuello. Hacer una rutina de estiramiento para acondicionar el cuerpo. Es como los futbolistas que precalientan antes de entrenar o jugar.